Lo hice solo, con la nueva bici de montaña y me divertí como un enano.
El único problema fue el tramo que realice después de cruzar la carretera de Colmenar a Cerceda y dirigirme a Colmenar, fue un tramo muy accidentado con muchas triatleras y zonas en las que tuve que poner pie a tierra. Hacía mucho tiempo que no hacia una ruta de montaña así y la verdad que se echaba de menos. (Os voy a contar un secreto, los últimos 15 kilómetros los hice con una pájara de cuidado, pero que quede entre nosotros, jeje).
El buen tiempo se nos viene encima, además de una contaminación en la ciudad de Madrid de cuidado. Como yo soy de la Sierra de Madrid, la contaminación la miro desde lejos y no tengo porque adentrarme en el “denso” ambiente de la ciudad. El positivismo que me envuelve es por dos razones, la primera es por el buen tiempo y la segunda es porque estoy escuchando un disco de King Oliver (otra de los vicios que tengo es el Jazz, un día os pondré una lista de los Vinilos y CD que tengo de Jazz).
Todo esto me hace darme cuenta de lo afortunado que somos los que practicamos deporte de forma habitual, y triatlón en particular, porque somos capaces de alegrarnos porque no nos duela el gemelo izquierdo al correr, porque hemos sido capaces de recortarle 4 segundos al crono en los 400 metros de la piscina o simplemente porque en la bicicleta empezamos a tener menos frio. Estas pequeñas cosas parecen tonterías, si se las cuentas a alguien que no hace deporte, pero que grande e importante nos hace sentirnos a nosotros. Si algún día os apetece contarme algo, no lo dudéis y escribirme un comentario. No hay nada mejor que saber que todos juntos estamos disfrutando de la llegada del buen tiempo.
Un saludo fuerte y nos vemos mirando a una distancia prudencial en “denso” ambiente de Madrid!!!!!!
Joer, 15km con pajara...ami cuando me entran cosas rarunas me quedo medio muerto jajaja
ResponderEliminarPués si podias ponernos algo de buena música jazz, estaría bién.
Saludos desde Zaragoza.
Alberto